Conchita
Para mí es la mejor tenista que he conocido. Una amiga catalana me lo discute "No olvides que Arantxa ha ganado más Grand Slam". Pero el caso es que, pasado el tiempo desde la retirada de Arantxa, la mejor tenista española sigue siendo Conchita que aún está entre las mejores. Además, durante los últimos años en que coincidieron, Conchita estuvo bastante por encima.
El juego de Conchita era espectacular. No es que yo no haya disfrutado con Arantxa. Era todo pundonor, llegaba a todo. Esa pelota imposible de alcanzar, Arantxa la alcanzaba. Pero Conchita era todo señorío cuando ganaba. Y cuando gana, porque ayer estuvo donde le corresponde llegando a octavos de final (de momento) en el torneo de Indian Wells.
¿Qué le falta pues a Conchita para ser reconocida? Algunos malintencionados dirán que le falta ser catalana. Yo diré únicamente que le falta que se hable de ella. Que se le tenga en consideración. Es curioso como cambia el punto de vista sobre un deportista si se habla bien o mal de él. Ronaldo lleva 12 goles este año. No es un mal número, son los mismos que lleva Riquelme. Teniendo en cuenta que nadie de su equipo termina de estar fino, no es como para decir las cosas que se dicen de Ronaldo. Ya me gustaría a mí que Villa llevara 12 goles. Sin embargo escuchas las opiniones sobre Ronaldo y puedes llegar a pensar que está acabado.
En Zaragoza tenemos un caso especialmente sangrante. La mejor deportista femenina de todos los tiempos es zaragozana. Se llama Sheila Herrero. Tiene más títulos mundiales que Angel Nieto, más copas de Europa que el Real Madrid, y cuatro récords del mundo. Sin embargo fuera de esta región apenas se le conoce. Alguno dirá que su deporte es minoritario. Y yo diré que también era minoritario el golf en España cuando Severiano Ballesteros alcanzó fama.
También recuerdo a Abraham Olano, que ganó un mundial, una Tirreno-Adriático entre otras y obtuvo un gran palmarés en grandes vueltas, pero que vivió toda su vida oyendo decir que él no era como Induráin. Pues no lo era ¿y qué? ¿Por eso fue un fracasado? No lo creo. Simplemente la sociedad ha decidido que no queda más opción que el éxito absoluto o el fracaso. Y es injusto y lamentable.
El deporte forma parte de nuestra cultura, da idea de los límites humanos. Además refleja nuestras miserias y grandezas como personas. Ya tengo ganas de que llegue el próximo Tour de Francia, el próximo mundial de fútbol, las próximas olimpiadas,... y ver al que sufre para superarse. Al que llega a una final imposible, aunque la pierda después.
El juego de Conchita era espectacular. No es que yo no haya disfrutado con Arantxa. Era todo pundonor, llegaba a todo. Esa pelota imposible de alcanzar, Arantxa la alcanzaba. Pero Conchita era todo señorío cuando ganaba. Y cuando gana, porque ayer estuvo donde le corresponde llegando a octavos de final (de momento) en el torneo de Indian Wells.
¿Qué le falta pues a Conchita para ser reconocida? Algunos malintencionados dirán que le falta ser catalana. Yo diré únicamente que le falta que se hable de ella. Que se le tenga en consideración. Es curioso como cambia el punto de vista sobre un deportista si se habla bien o mal de él. Ronaldo lleva 12 goles este año. No es un mal número, son los mismos que lleva Riquelme. Teniendo en cuenta que nadie de su equipo termina de estar fino, no es como para decir las cosas que se dicen de Ronaldo. Ya me gustaría a mí que Villa llevara 12 goles. Sin embargo escuchas las opiniones sobre Ronaldo y puedes llegar a pensar que está acabado.
En Zaragoza tenemos un caso especialmente sangrante. La mejor deportista femenina de todos los tiempos es zaragozana. Se llama Sheila Herrero. Tiene más títulos mundiales que Angel Nieto, más copas de Europa que el Real Madrid, y cuatro récords del mundo. Sin embargo fuera de esta región apenas se le conoce. Alguno dirá que su deporte es minoritario. Y yo diré que también era minoritario el golf en España cuando Severiano Ballesteros alcanzó fama.
También recuerdo a Abraham Olano, que ganó un mundial, una Tirreno-Adriático entre otras y obtuvo un gran palmarés en grandes vueltas, pero que vivió toda su vida oyendo decir que él no era como Induráin. Pues no lo era ¿y qué? ¿Por eso fue un fracasado? No lo creo. Simplemente la sociedad ha decidido que no queda más opción que el éxito absoluto o el fracaso. Y es injusto y lamentable.
El deporte forma parte de nuestra cultura, da idea de los límites humanos. Además refleja nuestras miserias y grandezas como personas. Ya tengo ganas de que llegue el próximo Tour de Francia, el próximo mundial de fútbol, las próximas olimpiadas,... y ver al que sufre para superarse. Al que llega a una final imposible, aunque la pierda después.
2 comentarios
Miyinalouzo -
Pavoguze -