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Cide Hamete

Nuestra Señora de París de Víctor Hugo

Estoy leyendo Nuestra Señora de París. La novela me está gustando, pero lo que más me gusta es el escritor que reluce detrás de la novela. Aún no había leído nada de Víctor Hugo. Todo un intelectual. Me fascinan sus cuidadosas descripciones y la pelea constante por implicar al lector en la conservación del patrimonio. Hay que pensar que en esa época no existía la conciencia que ahora tenemos en ese campo. Baste como ejemplo el hecho de que la sala de oración de la Aljafería se usó como cocina hasta no hace muchas décadas.

También deja su visión sobre el salvajismo de la ciudad y la pelea de clases. Sin embargo no deja de lado los sentimientos de los protagonistas. Rara vez un autor preocupado por la dimensión social y política de una sociedad da tanta importancia al sentimiento y al amor por la belleza. Transmite la soledad de Quasimodo, la locura íntima del archidiácono que lo adopta, las ensoñaciones de la soñadora pero justa Esmeralda. Personajes faltos de cariño, llenos de pasiones, personajes que sueñan, que luchan, que resisten, que pecan, que sufren, que se rebelan de forma íntima o de forma pública, que se aislan,...

En fin, supongo que muchos lo habréis leído. Los que no, no dejéis que la Disney os estropee la historia, no es una novela exclusiva para jóvenes. No creáis lo que viérais de la película de dibujos animados. Creo que acabo de descubrir a un autor que formará parte ya para siempre de esa tropa que me acompaña un rato antes de quedarme dormido: Galdós, Cervantes, Dostoievski, Dumas, Unamuno, Stevenson, ...   ...Hugo

 

 

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*Sí, he vuelto ¿hace falta alguna explicación?

3 comentarios

Javier -


No, no hace falta explicación para el regreso, pero me alegra saber que estás por aquí de nuevo.

Abrazos

Nuria -

Me encanta que vuelvas a la blogosfera, Cide. Me encanta leerte. Y me encanta también que lo hagas con nuevas citas, no hace falta que digas más. Te vuelvo a enlazar.

acróbatas -

No hace falta que diga que me encanta que regreses, ¿verdad? Y me encanta más que lo hagas con Victor Hugo. Un beso grande!